CENTRO DE DATOS

Vamos a hablar en este post de la Recesión económica mundial y centros de datos. No podemos ser ciegos, ajenos a lo que sucede con la economía mundial.

La recesión económica se manifiesta como una disminución general de la vitalidad económica y el consiguiente desempleo de un gran número de trabajadores. Una recesión severa se definiría como una depresión. Una serie de factores convergen para hacer de está coyuntura un entramado difícil de discernir.

 Inflación

En todas las economías tanto industrializadas como las que van en camino, hay un componente inflacionario alto, desbordante; claro, estoy hablando en términos generales. Hay países que pueden escapar un poco de este factor de empobrecimiento. En el caso de Colombia, la espiral de precios altos que lleva varios años, incluyendo por supuesto a los materiales de la construcción y,  el incremento salarial elevado durante el último año, han enturbiado un poco las aguas para los centros de datos y los empresarios. Al encarecerse los insumos, la energía, el hardware y la mano de obra, muchas compañías pueden frenar su ritmo de crecimiento, su estrategia de inversión sostenida, sus planes de expansión, a la espera de tiempos mejores.

Devaluación

Este post no pretende ser un tratado de economía, sin embargo, a todos los emprendedores y personas de negocios nos resulta vital entender está terminología. La inflación es el deterioro de los ingresos vía el encarecimiento de los productos y servicios. Por su parte la devaluación es la pérdida de poder adquisitivo de las monedas locales frente al dólar y las monedas referentes a nivel mundial. Está situación, le da un trato especial a las exportaciones, es decir, se ven favorecidas, a diferencia de las importaciones que se ponen terriblemente costosas. Esto se traduce en una oportunidad de ser más competitivos a nivel internacional si enviamos, por

decir algo, alimentos o vendemos servicios a países extranjeros. Un ejemplo pudiera ser la exportación de flores y esmeraldas. 

 Transición energética

La dependencia de combustibles fósiles se ha visto bruscamente entrecortada (el conflicto bélico entre Ucrania y Rusia tiene mucho que ver); los costos del petróleo y sus derivados se ha ido por las nubes, añadiendo sobreprecio a toda la cadena productiva.

Incertidumbre mundial

A nivel global, aún persiste el Covid en sus distintas cepas, dando muchos inconvenientes a países como China y otros. Está alerta sanitaria constante pone en jaque el aparato productivo de los países y perjudica el flujo natural de los negocios. Nadie sabe a ciencia cierta qué va a pasar, si la epidemia se acaba o sigue en constante mutación.

Incertidumbre a nivel nacional

En el caso de centro de datos Nebula, de HostDime, todo su proceso de construcción ocurrió durante los picos más complicados de COVID; recurriendo a todas las medidas sanitarias recomendadas por los expertos, continuamos en nuestra misión de culminar con éxito la puesta a punto de nuestro data center.

Más factores de preocupación

Lo anteriormente descrito, frena el turismo, la producción, la industria, genera estrés en las personas y un ambiente más hostil que de costumbre. Si a lo anterior le

añadimos la situación de Rusia vs Ucrania que tiene al mundo polarizado, más allá de términos políticos, en decisiones netamente económicas, el cóctel se torna realmente explosivo. Finalmente, la geopolítica, el clima extremo, etc. siguen siendo importantes incertidumbres que afectan a la » inflación » . Tanto Rusia como Ucrania son importantes exportadores de productos básicos a granel en el mundo. El conflicto en curso entre Rusia y Ucrania ha hecho que el desarrollo futuro de la situación sea más incierto. Si las sanciones de EE.UU. y la UE obligan a Rusia a implementar recortes de producción como represalia, los precios mundiales del petróleo podrían elevarse aún más. Al mismo tiempo, en el contexto del calentamiento global, el impacto adverso del clima extremo, como fuertes lluvias, inundaciones, sequías y frío extremo, en la producción mundial de alimentos y materias primas puede volverse cada vez más evidente en el futuro, lo que conducirá a un aumento fluctuaciones en los precios de las materias primas relacionadas y convertirse en un fenómeno inflacionario global, un factor importante del aumento.

Lo que nos preguntamos

¿Se transmitirán los sobrecostos al consumidor? 

¿Seguirán subiendo los precios como se ha venido dando?

¿Existe un flujo de caja suficiente para soportar está situación sin elevar las tarifas?

Reflexiones

Con la crisis socio política de Ucrania no solamente se puso difícil el asunto de los combustibles,la inflación galopante y la devaluación de las monedas, también se
rompió la cadena de insumos, como metales o semiconductores, tan importante en la industria de los data centers y el cloud computing. 
La construcción de centros

de datos en países no desarrollados o en vía de desarrollo como Colombia, si bien es cierto se ven influenciados por todo lo que hemos mencionado, también incentivan la industrialización y el desarrollo del entorno empresarial de sus ciudades y comunidades. A la larga esto es una gran ventaja. Las necesidades de Cloud se están incrementando a ritmos sorprendentes en la región; habría que pensar si el volumen de estos negocios compensan el desgaste presupuestal indicado en nuestro post por factores internacionales que hablan de una recesión. Y es la primera vez que el sector Cloud, desde su nacimiento, se enfrenta al estigma de una recesión tan prolongada. Pese a esto, la demanda de servicios de internet en general es lo que empuja el crecimiento de los centros de datos: big data, informática perimetral, streaming, red de operadores de hiperescala, etc, etc. Interesante paradoja. El panorama resulta complejo; no obstante, dado que los centros de datos juegan un papel crucial en la economía del mundo, no dudamos ni por un instante que este tipo de circunstancias por las que atraviesa la economía mundial, lo que hará a la larga, es volvernos creativos y cada vez más eficientes con el uso de recursos, para brindarle a los clientes de los servicios involucrados en un centro de datos, cada vez mejores prestaciones, garantías y facilidades. Donde puede haber una contracción fuerte es en los centros de datos propios, onpremise, cuya economía de escala es probable que no pueda aguantar tantos golpes de los indicadores económicos.